Cuidá Tu Salud Mientras Viajás
Existen muchas maneras de evitar que problemas de salud arruinen tus vacaciones. Pues de la misma manera que las personas están prestando más atención a la seguridad al viajar, también deben prestarle atención a la salud durante los viajes.
Seguí estos pasos para mantenerte saludable y feliz en el extranjero.
Antes del Viaje
1. Informate
Si vas a destinos exóticos o países en vías de desarrollo, debés consultar sobre las vacunas requeridas o recomendadas para viajar a esos destinos, además de información sobre enfermedades prevalentes y otros peligros potenciales.
2. Consultá con un profesional de la medicina
Una visita a tu médico de cabecera puede ser todo lo que necesitás. Los especialistas están al día con los últimos avances en medicamentos.
Cerciorate de estar al día con las vacunas de rutina. Y no esperes hasta justo antes de salir. El mejor momento para ver al médico para vacunas es entre cuatro y seis semanas antes de viajar, ya que algunas vacunas requieren una serie de inoculaciones.
3. Consultá con tu proveedor de seguros
¿Estarás cubierto en el extranjero? ¿En los países específicos que vas a visitar? Si no es así, considerá comprar una póliza complementaria. Si te dirigís a una zona que no cuenta con atención médica de calidad, una cobertura de seguro de evacuación pagará el costo de transporte para tratamiento en otro lugar. Empacá los medicamentos recetados en tu equipaje de mano. Y llevate cualquier medicamento de venta libre que podás necesitar.
Mientras estás de viaje
4. Lavate las manos
Lavate las manos con frecuencia y siempre antes de comer. Llevá toallitas antisépticas o desinfectante de manos para las ocasiones en que no encontrés un lavamanos. Las toallitas antibacteriales son prácticas para limpiar las mesitas plegables de los aviones y otras superficies donde los gérmenes permanecen.
5. Tené cuidado con lo que comés y bebés
Un número de bacterias y parásitos que causan diarrea, gastroenteritis e incluso hepatitis pueden transmitirse a través de los alimentos y el agua contaminados. Limitate al agua embotellada, a menos que estés absolutamente seguro de que el agua del grifo se puede beber de manera segura. Lo mismo aplica para cepillarse los dientes; y mantene la boca cerrada en la ducha.
6. Usá repelente de insectos
Esto es válido para cualquier lugar donde las enfermedades transmitidas por mosquitos son un problema. El virus del Zika ha causado alarma, particularmente debido a su relación con el devastador defecto congénito, la microcefalia; el trastorno neurológico de Guillain-Barré; y el hecho de que la enfermedad se puede transmitir sexualmente. Sin embargo, otras enfermedades transmitidas por mosquitos, como la malaria, el dengue y el chikungunya, también tienen efectos debilitantes.
Cuando regresés
7. Las primeras semanas
Si tenés fiebre dentro de los primeros 30 días de haber regresado de una región donde la malaria está presente, consulta a un médico de inmediato. Hacé lo mismo en caso de problemas gastrointestinales que duren dos semanas o más. Las erupciones y otros problemas de la piel pueden ser menos motivo de preocupación, pero si son persistentes, cuidá tu salud y consultá a tu médico.